De Mas, la peluquera y la independencia de Cataluña

Hay que ver que la ha liado Mas con el asunto este de la independencia de Cataluña. Se ve que el tipo no sabia que hacer con el Gobierno de Cataluña, como manejarse ante la crisis, como financiar la insuficiencia financiera, administrar la administración, fiscalizar el fisco, sanear la sanidad y educar la educación y, entonces, en una decisión histórica y sin precedentes, ha decidido preguntarle a su peluquera. Y le ha dicho que lo resuelva ella. Que él hará lo que ella le diga en todas estas materias, porque se fia mucho de su experiencia y sabiduría, entre permanente y aclarado, y que le diga lo que tiene que hacer, que él lo hará al pié de la letra.

Es una cosa increíble, no me digais que no, que Mas decida preguntarle a la peluquera como tiene que hacer para Gobernar el país. Claro que, si lo miramos bien, esto puede ser muy beneficioso para todos, y más (para Mas) si tenemos en cuenta los difíciles momentos por los que atraviesa nuestra sociedad en orden al empleo, quiero decir, a la falta de empleo. Porque está claro que es más fácil estudiar para peluquera que para President de la Generalitat. Así podríamos poner a un montón de jóvenes y jóvenas a estudiar peluquería y emplearlos a todos de Presidentes de la Generalitat y de un montón de cosas más (y Mas), ya que los presidentes, por lo que se vé, no valen para nada, o, en todo caso, valen mucho menos que una peluquera a la hora de tomar decisiones de Estado.

Al fin y al cabo, trabajo no les faltaría como peluqueras porque cabeza tiene todo el mundo, y, aunque algunos no sepan para qué sirve, como le sucede a Mas, todos necesitan una peluquera que les arregle el pelo, o la falta de él, que da lo mismo. Y es que yo comprendo a Mas porque una peluquera que sepa afeitar a un calvo el poco pelo que tiene, pongamos por ejemplo, tiene que saber afeitar también las gastos de una administración pública cuando sea necesario; y si sabe cortar el pelo, tienen que saber recortar lo que sea necesario cuando sea necesario y donde sea necesario (pienso, por ejemplo, en los huevos de algunos); y si sabe hacer una permanente para que un peinado o un moño permanezcan en su sitio, está claro que una peluquera es perfectamente capaz de mantener lo que deba permanecer sean estos bienes de tipo económico, social, histórico, patrimonial o cultural, que es de lo que se trata, cuando se trata de conservar algo.

Por eso, creo yo, Mas ha decidido consultar a la peluquera el futuro político de Cataluña. Lo que no entiendo es porqué no hace lo mismo Rajoy, quién parece que tampoco sabe que hacer con España. No le pregunta Mas a una peluquera catalana? Pues que Rajoy le pregunte a una peluquera española! Y luego que ellas decidan, mientras se tiran del moño y se destrozan el peinado y se arañan en la cara con sus uñas manicuradas, y nos digan como debemos organizarnos los españoles política, institucional y territorialmente. Y los españoles haremos lo que nos digan nuestras peluqueras. Tal y como quiere Mas, y, a lo mejor, también Rajoy.

Ahora mismo voy a decirle a la niña, quién queria estudiar un MBA en dirección de empresas con varios idiomas, que se olvide de estas tonterías y se meta a peluquera si quiere hacer algo de provecho en el futuro. Y que se prepare bien, porque van a poner en sus manos de perfecta peluquera el destino de las naciones. Entre ellas la nuestra. Joer con la peluquera! Lo que sabe! Verdad que sí Mas?