Obélix se ha hecho ruso!

Lo que nunca nadie hubiera creído, ha sucedido: Obélix se ha hecho ruso. Putin le acaba de dar el pasaporte que así lo acredita. Parece una cuestión banal en el mundo actual, pero yo me pregunto: se puede ser Obélix siendo ruso? Qué pensará Asterix de todo esto? Igual le retira la amistad! Y los jabalíes? Quién se los va a comer ahora que Obélix se cambia al caviar? Ya me veo a toda la Galia infestada de jabalíes por todas partes; porque no pretenderá Obélix que se los coma todos Astérix sólo! Esto tiene pinta de catástrofe ecológica de tres pares de cojones y dos trenzas si alguien no lo evita. Y sigo con mis preguntas: y que hará Idéfix? Seguirá a su querido Obélix ahora que se muda a la estepa rusa? O le abandonará y se irá con el bardo Asuracentúrix a pesar de lo que éste desafina? Y Panorámix, a quién va a decirle que no cuando les de a beber la pócima mágica? Tirarán los galos a Edadepiédrix a la marmita para que alguien sustituya a Obélix en el papel de galo travieso de la cosmogonía francesa, ahora que se ha convertido en un ruso travieso de la cosmogonía rusa? Y qué pensará su mujer de todo esto? Me refiero a la mujer de Edadepiedrix (que está como un jabalí de la Armórica puesto a dieta) que ya se sabe que Obélix está soltero y sin compromiso. Y Abraracúrcix, le montará a Obélix un consejo de guerra por alta traición y le prohibirá volver al poblado? Y lo que es más grave, conseguirán los romanos, ahora que ya no está Obélix porque se ha ido a Rusia, conquistar toda la Galia, pero toda, toda? Esto puede ser una desgracia para la historia de Europa, que habría que modificarla toda, pero toda, toda! Y qué pensará Tutatis de la decisión que ha tomado Obélix? Es que Obélix no tiene miedo a nadie, ni a dios? Es que no existe Tutatis? Porque yo creo que Tutatis le va a castigar a Obélix, que no se puede despreciar la propia identidad cambiando el asado de jabalí por un canapé de caviar y el buen vino de Burdeos por un vasito de vodka, sin que se rompa algo en lo más profundo de tu ser o de tu hígado. Claro que la culpa de todo la tiene Hollande, que ya se lo dije yo a los galos, como elijáis a este, se os va a caer el cielo encima de vuestras cabezas. Y mira lo que ha pasado: que a Obélix se le ha caido un trocito de cielo encima de su cabeza y le ha dado por creerse que es ruso, igual que antes se cayó dentro de la marmita y le dió por creerse que era nuestro héroe frente a la tiranía y por la libertad, aunque fuera un poco tonto, que para listo ya estaba Astérix. Este último, que yo sepa, aún sigue siendo galo; aunque como Hollande siga con sus tonterías no me extrañaría nada que pronto se hiciera americano. Y es que Hollande se parece mucho al Jefe Abraracúrcix, que mucho hablar y fanfarronear, pero la que decide lo que se hace es Arabella, su mujer. Y ya se sabe que cada vez que Arabella se metia de por medio en asuntos de política se armaba el follón en la aldea. Como con Obélix.